“SER O NO SER”, esa es la cuestión: es más noble aguantar las flechas de la fortuna caprichosa a navegar en el mar de tranquilidad.
“LA VIDA ES RELACIÓN”, ¿cómo entender la relación con nuestro trabajo, con el dinero, con el poder, con la sociedad, con la naturaleza y el universo?.
Mirándonos en el espejo de la “RELACIÓN”, ¿qué cosas hacemos y cómo las hacemos en relación con los demás?, observando lo que pensamos y sentimos.
El PERSONAJE, es nuestra careta. La imagen que tenemos de nosotros mismos. Lo que creemos ser, con todos sus apegos de identidad.
El PERSONAJE, tiene pautas de comportamiento en función de su identificación con el rol que representa: el de carpintero, electricista, notario, sacerdote, juez, ministro o Presidente de Gobierno.
Representa el “YO”, el yo pienso, el yo siento. Es la imagen que tenemos de nosotros mismos, compuesta por nuestras experiencias, nuestra historia personal, el país de nacimiento, el nivel social y el educacional.
Para salir del PERSONAJE, es necesario observarlo, poniendo atención a lo que pensamos y por qué lo pensamos; a las emociones, que siente nuestro personaje, y a todos los automatismos del mismo.
El PENSAMIENTO es otra identificación o apego. También creemos ser aquello que pensamos y nuestras ideas del mundo y de las cosas. Aunque el pensamiento es una perfecta herramienta de trabajo, las emociones, las angustias o el mismo sufrimiento son interpretaciones de la realidad a las que nosotros les damos contenido, y forman parte nuestros pensamientos. Los valores sociales y los prejuicios, también son apreciaciones subjetivas de la realidad.
Para salir del PENSAMIENTO, es necesario observar con atención el movimiento del pensamiento y las emociones; la libertad la sentimos en el descubrimiento de ser.
Hay un TIEMPO SECUENCIAL, donde hay un movimiento, el movimiento de la vida, en un cambio permanente.
Pero a NIVEL REAL, es otro elemento de confusión, porque el PASADO está compuesto de recuerdos; los recuerdos forman parte de la memoria y por supuesto pueden en mayor o menor medida condicionar el presente, pero no son más que memoria.
EL FUTURO, son proyecciones de la realidad, que pueden hacerse reales o no, pero no son más que expectativas.
Somos PRESEN: lo único real es lo que ocurre ahora. Lo difícil para el PENSAMIENTO es conectar con el PRESENTE, por las distracciones que genera lo que creemos ser, por vivir en los recuerdos del pasado o en las proyecciones de futuro. ¿Cuál es el mejor
momento?: el único que existe, el presente.
La ENERGIA, como potencialidad de acción en la relación y en cuanto materia, las múltiples funciones que realiza el cuerpo y de las que apenas somos conscientes:
- El CORAZON: realiza unas 70 pulsaciones y bombea 5 litros de sangre por minuto.
- Los PULMONES: inspiran y expiran entre 5 y 6 litros de aire por minuto.
- EL ESTOMAGO: realiza importantes procesos digestivos.
- El HÍGADO: depura la sangre y los riñones.
- El CEREBRO: realiza también millones de interconexiones, que nos permiten hacer multitud de funciones, como, pensar , leer, cantar, bailar, hablar, etc.
Todos estos procesos son automáticos. Únicamente tomamos algo de consciencia de ellos cuando nos duele la cabeza, o el estómago o cuando nos cuesta respirar.
SOMOS UN FOCO DE CONSCIENCIA, que nos permite observar el mundo, poner atención a la relación con él, y al movimiento del pensamiento, a sentir la respiración, a la aceptación de dolor. Esta toma de consciencia es en definitiva amor.
La esencia del SER, del YO PROFUNDO, se encuentra tras la liberación del apego al PERSONAJE, al pensamiento y al tiempo; y también mediante la observación de nuestro PERSONAJE, en la relación con los demás, y en la atención a lo que pensamos, a las emociones, a orientar el pensamiento, a vivir en el PRESENTE.